Historia de vida de emprendimiento: Dulce Erika López Venancio
Hola, me llamo Dulce Erika López Venancio, esposa, madre y emprendedora.
Te invito a leer mi historia de vida de emprendimiento y superación personal, estoy convencida que te animará a lograr tus sueños y metas sin que los obstáculos que la vida a veces nos pone, nos detenga para alcanzarlos.
Gracias.
Mi historia
Hoy, quiero agradecer a DIOS por todo lo que ha hecho en mi vida, porque Él nunca se equivoca.
Como toda joven, quería casarme, tener una hermosa familia y desarrollarme profesionalmente.
Soy contadora fiscal de profesión y trabajaba en la contraloría municipal como jefa de Modernización y Simplificación Administrativa en Tultitlán, Estado de México.
A mis 23 años, tenía al mejor hombre en mi vida, los años han confirmado que lo es.
En poco tiempo llegó la mejor noticia, estaba embarazada de nuestra primera hija.
Tenía muchos planes de vida; sin embargo, todo cambio.
La enfermedad
Mi vida cambió cuando tenía 24 años, después de tener a mi primera hija.
Por alguna razón desconocida, me costaba caminar, empecé a perder la fuerza de mis manos y de mi cuerpo.
Económicamente estaba bien, pero era tan difícil moverme que tuve que dejar mi trabajo.
Mi estabilidad económica cambió.
Como madre y esposa, sentía impotencia.
El no poder cargar a mi niña, y con el tiempo, correr y jugar con ella.
Reproches a Dios
En mi soledad, le reprochaba a Dios, ¿Por qué a mí?.
Sí yo tenía un camino lleno de ilusiones y metas por alcanzar.
Con lágrimas en mis ojos de frustración, le pedía que me permitiera volver a dar pasos firmes y seguros.
Llegue al grado de no poder darle a mi hija un vaso de leche porque no tenía fuerzas en mis brazos.
Y no tardaste mucho, en responder.
En un instante, empezó mi transformación.
Empecé a sentir que no podía darme el lujo de estar compadeciéndome, que tenía por quién luchar.
Empiezan los negocios
Empezamos vendiendo en los mercados y de casa en casa; leche de vaca, quesos, despensas, ropa usada y todo lo que podíamos.
Siempre alado de mí esposo Everardo, mi compañero, mi complemento.
Mi esposo, se despertaba en la madrugada para ir a comprar la leche, los quesos y los productos para las despensas.
Llegaba y empaquetábamos todo en bolsas para salir a véndelo.
Nuestra primera experiencia en los negocios no término bien, nos ganaba el corazón y empezábamos a dar nuestros productos a crédito.
Fue tan difícil poder cobrar lo que nos debían, que con el tiempo, perdimos todo lo que habíamos logrado.
Inicia la preparación
Con el tiempo, conocimos un negocio de venta por catálogo de productos para mujer donde estuvimos por 8 años.
Empezamos a crear una red de clientes por todo el Estado de México que más adelante nos serviría para nuestro próximo emprendimiento.
Pasábamos horas manejando de un lugar a otro para hacer las entregas.
Poco a poco estábamos teniendo beneficios, buenos ingresos y premios por nuestras ventas.
Otro cambio en mi vida
10 años después del nacimiento de mí primera hija, nuevamente quedé embarazada.
Este embarazo lo disfrute al máximo, porque nunca me sentí mal.
Al octavo mes, en una revisión médica, me detectaron Preeclampsia y Síndrome HELLP.
Esta es una complicación del embarazo que amenazaba mi vida y los médicos no daban esperanza.
Me recomendaron que debía suspender mi embarazo para salvar mi vida.
Pero no estaba dispuesta a hacerlo, lucharía hasta el final.
Me aferre a Dios, a mi familia y a la vida.
La lucha entre la vida y la muerte estuvo tan fuerte que tuve un paro cardíaco que me mantuvo en terapia intensiva durante 1 semana, sin saber nada del exterior.
Pero Dios nunca me abandono.
Al final, en contra de todo pronóstico médico, salve mi vida y la de mi hija.
Sé que tengo una misión en esta vida y una familia que cuidar.
Un nuevo camino: emprendimiento y superación personal
Tres meses después del nacimiento de mí segunda hija, empecé a tomar un producto de la marca BLEN.
Fue tal mi asombro en cómo me ayudaba a sentirme bien, convencida que el producto es bueno, que deje el negocio en el que llevaba 8 años y aposté a mi bienestar.
Me arriesgue e inicie como promotora.
Pasó poco tiempo, por mis niveles de ventas, llegue a Distribuidora Mercantil Independiente, que es un tipo de Gerente.
En 4 años logré avanzar y ahora atendiendo Estado de México, Ciudad de México e Hidalgo.
Trabajo arduo e inteligente
Nos despertamos a la 5 de la mañana para alistar a nuestras hijas para llevarlas a la escuela.
Después de dejarlas, empezamos nuestra rutina de entregar productos en puntos ya establecidos con nuestros clientes.
Tenemos solo unas horas de trabajo, porque después de mediodía, debemos recoger a nuestras hijas para llevarlas a casa.
Nuestra área de influencia abarca una zona en la que viven más de 20 millones de habitantes, los traslados de un punto a otro, pueden llevarte horas, así que debemos trabajar de manera inteligente.
Descubrimos que la mejor manera de vender nuestros productos y de conseguir nuevos promotores es hacerlo a través de las redes sociales.
De esta manera, planeo mi tiempo del día:
Por la mañana:
- Mi familia – llevar a mis hijas la escuela
- Promocionar productos en redes sociales
- Captar nuevos promotores
- Entregar productos
Por la tarde:
- Mi familia – recoger a mis hijas a la escuela.
- Entregar productos a clientes
- Atender personalmente a los promotores
Por la noche:
- Mi familia
- Tiempo para atender a los promotores y entregar algunos productos.
La mayoría de los días, nuestra jornada de trabajo es hasta media noche.
Pero lo hago con mi esposo a mi lado, el me lleva de un lugar a otro, me ayuda a hacer las entregas.
Te estarás preguntando, ¿Pues cuando trabaja ese señor?
Pues siempre, ¡lo hace conmigo!
Llegó el punto en que nos iba tan bien, que dejó su trabajo para estar conmigo.
Ahora, también está en el negocio y está a la misma par que yo.
Beneficios
El principal beneficio de haber emprendido esta aventura, es que trabajamos en familia, tenemos el tiempo para hacer lo que queremos.
Y además, tenemos buenos ingresos que dependen principalmente de nosotros.
Por nuestro arduo trabajo, hemos tenido recompensas cómo viajes a lugares hermosos completamente gratis, fruto de nuestros logros.
Palabras finales
No todo ha sido fácil, he encontrado personas que no les importa mi condición. Sin embargo, han habido personas que confían en mí y me han apoyado para lograrlo.
A todos, les doy las gracias porque esto me ha enseñado a ser fuerte, a nunca rendirme a la adversidad, porque uno, es su propio rival a vencer y alcanzar su éxito.
Sigo en esa transformación, hay retos por vencer.
Dios, tú me indicarás el momento.
Hoy por hoy, puedo decirte, para mí la vida es fascinante, porque respiro, tengo una familia y un trabajo donde brindo bienestar y salud.
Gracias.
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